En la reunión realizada el 3 de enero (en la CTA Capital) para coordinar el apoyo a la lucha del Casino, se planteó un importantísimo debate:¿Qué se debe hacer frente al accionar represivo oficial y a las patotas que golpean a los luchadores, como sucedió ayer con el desalojo de los trabajadores del Casino?
Ese día, nuestros compañeros propusieron impulsar la formación de piquetes de autodefensa, una posición, que lamentablemente, no fue compartida por varios de los dirigentes de la izquierda y sectores combativos allí presentes. Algunos, se opusieron, argumentando que no estarían dadas las "condiciones para aplicar esa política", y otros, diciendo que lo único que habría que hacer es "exigirle al Estado que garantice la libertad de protesta…" Desde nuestro partido discutimos fraternalmente contra estos compañeros y sus argumentaciones, porque estamos convencidos que no basta con movilizarse para exigirle al gobierno y a sus ministerios que cumplan con respetar las libertades: ¡Para defenderlas, es necesario utilizar la misma dureza que se implementó a la hora de conquistarlas! De allí la necesidad de los piquetes... No es cierto que no existan condiciones para organizar estos organismos de autodefensa: Los heroicos petroleros de Las Heras demostraron hace más de un año su disposición para enfrentar con dureza a la policía kirchnerista. Lo mismo hicieron los pibes del Casino y de Pagoda, cuando se pelearon con las patotas, la prefectura y la policía; y también esas decenas de trabajadores de Metrovías, que en el último paro del Subte, permanecieron en sus cabeceras esperando que alquien los organizara para echar a los matones de la burocracia. Ahora, que la clase obrera comenzó a recuperar su protagonismo, es cuando reaparecen sus mejores métodos y tradiciones. Por eso, junto a las asamblelas, las huelgas y los fondos de lucha, comenzaron a aparecer los piquetes para defender a estas huelgas y asambleas. Las comisiones internas y las agrupaciones deben utilizar todos estos recursos junto con el enorme y riquísimo arsenal "táctico" con que cuenta el movimiento obrero argentino en su larga historia de lucha. En ese sentido, las asambleas, las internas, las agrupaciones y los partidos tenemos que asumir –como una cuestión vital- la tarea de preparar la defensa activa y militante de las huelgas y de los luchadores, poniendo en pie los piquetes obreros para frenar los ataques de la policía o la burocracia. El próximo plenario de comisiones internas y agrupaciones combativas que convocaron los compañeros del Casino y otros sectores, será una buena oportunidad para discutir estas cuestiones y comenzar a implementarlas. ¡Todo el Apoyo a la Lucha del Casino y Demás Conflictos Obreros!Convergencia Socialista
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